Conoce al Lobo Gris Mexicano

¿y esos dientes para qué son? Para comerte mejor

El Lobo Gris Mexicano (Mexican Grey Wolf) es una de las especies depredadoras de control más incomprendidas de la historia. Su especie llegó al punto, en la escala de especies en peligro de extinción, de declararse sin registro en vida silvestre. No más lobos en el monte. Los únicos Lobos que seguían con vida estaban en cautiverio y/o zoológicos.

Al no haber lobos en vida silvestre, las especies de presa – venados, ciervos, bisontes, y demás, se estaban convirtiendo en una plaga, que a su vez, estaba provocando menos pastizales, y si entienden a donde voy, la falta de Lobos en la vida silvestre hizo que el humano se diera cuenta de la importancia del lobo como especie depredadora de control.

Afortunadamente, la raza humana actuó justo a tiempo – o eso esperamos – y lograron rescatar la especie con programas puntuales de conservación y reinserción. Al día de hoy, ya se han reinsertado Lobos a la vida silvestre, y aún se mantienen las labores para su conservación.

Este trío de machos me los encontré en el Parque Natural El Tecuán, en el Estado de Durango. Son parte de un programa de conservación y reinserción – los llevan a Chihuahua para su apareamiento, con la finalidad de seguir reinsertando Lobos en la vida silvestre.

Si lo piensan bien, el cuento de Caperucita y El Lobo, no era más que una herramienta propagandística dentro de la cacería sistémica y descontrolada que vivieron los Lobos en las décadas de los 70s y 80s.

Esta serie de fotografías las tomé con una Nikon D7000, y un lente Sigma 150-600mm Contemporary. Aunque la óptica de Sigma es de las mejores, para mi gusto, el sensor de la cámara – por no ser de alta gama – me produjo mucho ruído, y de no ser por DeNoise y Sharpen de Topaz labs, el encuentro en vida silvestre de estas hermosas criaturas habría quedado solo en mis recuerdos.